viernes, 20 de agosto de 2010

Lodo y pasto


-El otro día fui a la panadería de Chamo y vi a su hija, la saludé y no me reconoció al principio, hasta que le dije que era O.H. y ya se acordó y nos preguntamos cómo estaba la familia. Y ya me fui con mi bolsa de pan.
-Ajá... ¿Y?
-Pues ya, nada. Tú siempre quieres desenlaces sorpresivos, pero mi vida sólo transcurre, sin sobresaltos. Estuvo duro el pan.

Al parecer me acabo de enterar de lo complejo del desarrollo, de la caminata errante, simple y sin dirección. Moverse sin sentirse perseguido, sin la desesperación de llegar a dónde sea, de llegar a piso firme. ¿Qué monstruosa incertidumbre nos incita a las metas tangibles? Llenos de miedo huimos de nosotros mismos.

Pero anoche fue distinto. Por un instante dejé de tener miedo, dejé de preocuparme de llegar a ningún lado, no había desenlace, sólo transcurso, sencillo y austero, caminando sobre el pasto húmedo y lodoso y recibiendo lo que las abuelitas llaman "el sereno". Y así, con serenidad, sólo caminar sin prisa, sin preocupación, disfrutando las delicias que se ofrecen a los sentidos.

¿Cuándo fue la última vez que disfrutaste las hojas fluorescentes de los árboles bajo una luz blanquesina a las dos de la mañana? Cuando no tienes expectativas de nada resulta una muy grata sorpresa las posibilidades que ofrece el mundo: las hojas, las palabras, el pasto, el lodo, todo es grandioso. Y está siempre ahí, dispuesto para todos.

Ni siquiera la certeza de repetir las mismas ideas que han sido expresadas infinidad de veces parece un impedimento para escribirlas de nueva cuenta; finalmente el desarrollo, y no el desenlace, ha adquirido una significación terrible: no busco conducirlos, ni a ustedes ni a mí, a ningún lado, sólo hablar porque tengo boca. Y pasto y lodo en los zapatos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

"¿Cuándo fue la última vez que disfrutaste las hojas fluorescentes de los árboles bajo una luz blanquesina a las dos de la mañana?" alguna vez caminando a la escuela en una mañana algo oscura tuve esa visión. Saludos Ben! :)

Aquiles Baeza dijo...

La ojas bajo una luz blanquecina a las 2 de la mañana, se disfrutan mejor si estas bajo el efecto d los ajos y las chocoretas, o no?